En la vida de todo diseñador existe un momento mágico, ese en el que las musas llegan y se posan sobre sus hombros. Para llegar a ese momento necesitamos una inspiración, un llave que abra la caja de las ideas.
Todos tenemos referencias que nos ayudan a inspirarnos. Diseño, fotografía, cine, música, literatura. Aunque no lo pretendamos, lo que otros han creado nos sirve como base para nuestras ideas. Desde niños, en nuestros estudios, nuestras inquietudes culturales, todos bebemos de fuentes que ayudan a construir nuestra identidad como creadores y que nos enriquecen.
Por eso estamos muy agradecidos a todos los que nos inspiran día a día en nuestro trabajo. Ese trabajo que en ocasiones mostramos al mundo publicándolo en nuestra web.
Por culpa de gracias a google nos copian
Google es el responsable del mayor número de visitas recibidas en nuestra web. Por suerte google le tiene cariño a nuestros trabajos y suele posicionar en primeros puestos del buscador algunos de ellos. De este modo, cualquier persona con necesidad de inspiración tiene la oportunidad de encontrarse con nuestros diseños.
Pero no todo es bonito en esta historia. Aunque cueste trabajo creérselo, algunas de las personas que encuentran nuestros diseños en google no se conforman con inspirarse y utilizan un inesperado atajo para cubrir sus necesidades ¡copiar directamente nuestro trabajo y publicarlo en su web! Si señores, ¡parece increíble pero hay gente que hace estas cosas!
Google puede estar tranquilo, no le vamos a exigir ninguna resposabilidad por el uso que hace un tercero (tampoco un canon). Estamos agradecidos de que nos de visibilidad y que permita encontrar nuestros trabajo al mayor número posible de personas. Además tiene una herramienta de búsqueda de imágenes muy práctica, nos resulta muy sencillo encontrar imágenes “similares” a las nuestras en internet.
Perfil del plagiador
A veces se trata de un simple estudiante que completa un blog durante su carrera, o una asociación o colectivo sin ánimo de lucro. Encuentran una imagen que les gusta en google y la utilizan. No nos parece grave, solo nos gustaría que citasen la fuente y ya de paso nos linkaran.
Pero, ¿qué pasa cuando el que lo hace es un supuesto profesional? ¿o la competencia? ¿o un negocio que se lucra con tu trabajo?
- Por ejemplo, alguien que dice ser diseñador profesional de logotipos y que usa nuestro portfolio para ilustrar su trabajo, ¿que se merece?.
- Un diseñador web que copia punto por punto el contenido de una de tus páginas con la intención de posicionarse.
- O una puntera escuela de negocios que utiliza tus imágenes en los blogs de sus masters (con marca de agua incluida).
Copia completa de una url de nuestra web, fotos y textos
Un caso a parte es cuando alguien utiliza tu diseño para presentarse a un concurso y lo gana, como cuando ganamos un concurso de carteles sin presentarnos.
a la izquierda nuestro diseño, a la derecha el plagio ganador
¿QUE PODEMOS HACER CONTRA EL PLAGIO?
Cuando nos encontramos con algún caso de uso indebido de nuestros contenidos podemos tomar diferentes medidas, pero ninguna nos garantiza resultados.
POR LAS BUENAS
Enviar un email: poco efectivo en ocasiones, el tono del correo puede ser amenazante “…retira el contenido o nuestra horda de abogados quemará tu aldea…” o bien conciliador “…porfa, has usado cosas mías por error, ¿eres tan amable de quitarlas?…”
Teléfono: cuando la ocasión lo merece, podemos llamar por teléfono al responsable del entuerto y probar una de las dos versiones, amenazante o conciliadora. En ambos casos las reacciones son muchas veces inesperadas.
Usar las redes sociales: a veces funciona. Pasamos de una discusión privada por email o teléfono a una exposición pública, como puede ser una mención en twitter o un comentario en la página corporativa de Facebook.
Ventajas: conseguimos más visibilidad dentro de nuestros seguidores (que suelen apoyarnos) y entre los seguidores de nuestro plagiador. En este caso siempre valoramos si queremos dar publicidad a nuestro plagiador. Y es que en ocasiones hasta le podemos beneficiar, ya sabéis lo que dicen,”que hablen de mí, aunque sea mal”.
En la mayoría de los casos suelen retirar el contenido sin hacer ruido, en contadas ocasiones además reconocen públicamente el “lapsus”.
.@open_innova está feo usar imagenes sin nuestro consentimiento, y más aún hacer hotlinking http://t.co/fTqYi7K1kU pic.twitter.com/yfGpcqgrPT
— intercastilla (@intercastilla) enero 5, 2015
POR LAS MALAS
Cuando nuestros intentos por solucionar el problema de manera cordial son infructuosos (o directamente se ríen de nosotros a la cara), puede ser el momento de tomar acciones legales.
Denunciar: Palabras mayores, un camino complejo y caro que no siempre consigue sus objetivos. ¿merece la pena? Siempre dependerá de quién nos ha copiado y para qué ha usado el contenido. No es lo mismo que te copie un ayuntamiento a que lo haga un blog. Que se use para una campaña publicitaria o para la cabecera de un post. Lo que nos aseguramos es la obligación de dedicarle dinero, tiempo y energías.
Uso de un logo modificandolo a su antojo
LSSI, LOPD y normativa de cookies: Ya sea para comunicarnos amablemente o para denunciar el caso, en primer lugar necesitamos conocer quién es el responsable de la página que publica el contenido. Para ello vamos al Aviso Legal de la web plagiadora en la que tienen que aparecer los datos del titular de la misma. No os lo váis a creer, pero sorprendentemente nos encontramos que en muchos casos no existe el obligado Aviso Legal y no encontramos por ninguna parte los datos del responsable de la web. Cuando esto ocurre, la web incumple la LSSI, y en la mayoría de los casos también la normativa de cookies, trámites por los que las empresas tenemos que pasar, queramos o no. En este caso, una denuncia a la Agencia Española de Protección de Datos es rápido, barato, legal y se puede hacer vía online. ¿Efectivo? Una denuncia con base fundamentada inicia un proceso que puede llegar a terminar con una sanción de hasta 30.000€. O más aún, hasta 150.000€, si es reincidente.
¿Está feo ser un chivato? Sí, pero más feo es robar el trabajo de otros para lucrarse con ello.
Amigos @CristianCast31 y @Antoniojparras,está MUY FEO COPIAR el trabajo de otros para vuestra web @sadyc2013 pic.twitter.com/u7OyTnSW9u
— intercastilla (@intercastilla) febrero 14, 2014
Seguimos trabajando
Si tomamos una imagen de una empresa que se dedica al diseño y la buscamos en google pueden pasar 4 cosas:
- es una imagen comprada de catálogo y la usan otras 20 empresas iguales, MAL
- es original y nadie más la usa, BIEN
- es una copia, MUY MAL
- es original y le copian descaradamente en blogs y webs, ¿BIEN?¿MAL?
Si tu competencia está entre las 3 primeras y tú en la cuarta, vas por el buen camino (o no tienes suficientes abogados). Seguiremos trabajando intentando que no nos roben.
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